Sin duda alguna, Zaragoza ha vivido el día del Pilar más extraño que se recuerde, pero a pesar de haber cancelado los actos festivos, los niños de 4 años han recordado sus costumbres y sus raíces.
Hemos querido pedirle a la virgen que todo esto pase pronto y que podamos volver a celebrar su día como se merece. Pero hasta entonces, nuestro pequeño homenaje en clase y con las máximas precauciones higiénico-sanitarias.
¡Viva la virgen del Pilar!
